En un intento por establecer una mesa de diálogo, legisladores morenistas extendieron una invitación a la presidenta de la Suprema Corte, Norma Piña, para discutir la desaparición de 13 fideicomisos. Sin embargo, Norma, fiel a las normativas, solicitó primero definir el marco normativo que respaldara esta convocatoria. Al no haber una invitación formal para discutir en el Senado, la presidenta de la Corte retiró su disposición para dialogar, enfatizando la necesidad de condiciones apropiadas para una discusión institucional entre poderes.
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