Fin a los desalojos masivos
El Infonavit ha anunciado un giro significativo: dejará de realizar desalojos masivos en viviendas invadidas. En su lugar, se implementará un nuevo programa de renta con opción a compra, diseñado para regularizar la situación jurídica de los ocupantes actuales. El enfoque pretende transformar ocupaciones irregulares en oportunidades de adquisición legal, evitando confrontaciones y costos procesales elevados.
Detalles del esquema de regularización
El director del Infonavit, mencionó que el programa está dirigido a viviendas deshabitadas e irregulares, con un contrato inicial de renta a precio preferencial. Tras un periodo de cuatro a cinco años, el inquilino podrá ejercer la opción de compra, siempre y cuando cumpla con los pagos establecidos. Si al término del periodo no regulariza la compra, no habrá obligación de desalojar, pero tampoco se otorgará la titularidad de la propiedad hasta que cubra el total de la deuda.
Metas y alcance del proyecto
El plan contempla regularizar entre 50 000 y 80 000 viviendas invadidas en los próximos tres años. Las administraciones federales prevé una inversión cercana a 5 mil millones de pesos, distribuidos en incentivos fiscales, asistencia técnica y subsidios para los primeros pagos de renta.
Beneficios financieros y sociales
Se anticipa que esta medida generará beneficios tanto para los ocupantes como para el Infonavit:
- Para los ocupantes: acceso a una solución legal, reducción de la incertidumbre jurídica y posibilidad de patrimonializar el inmueble.
- Para Infonavit: disminución de costos por procesos judiciales, control de cartera vencida y aumento de la recuperación de adeudos a mediano y largo plazo.
Reacciones de actores involucrados
Representantes de organizaciones sociales han aplaudido la medida, calificándola como un paso humanitario y pragmático. Sin embargo, han advertido que debe existir una supervisión estricta para evitar fraudes, especulación y garantizando que los inmuebles realmente cumplan con condiciones mínimas de habitabilidad. Por su parte, opositores políticos sostienen que esta política podría incentivar nuevas invasiones si no se acompaña de medidas preventivas.
Desafíos operativos y legales
El Infonavit enfrenta debilidades logísticas: detectó que muchas viviendas invadidas carecen de servicios básicos, lo cual podría retrasar su incorporación al programa. Además, será necesario armonizar la normativa federal con las leyes locales de cada entidad federativa, lo que podría suponer meses o incluso años de coordinación intergubernamental.
Conclusión
El esquema de regularización anunciado por el Infonavit, que sustituye los desalojos por un sistema de renta con opción a compra, representa un cambio de enfoque relevante hacia una política más inclusiva y humanitaria. Si bien promete beneficios patrimoniales, económicos y sociales, su éxito dependerá de la correcta implementación, supervisión institucional y reformas normativas en cada estado.
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