El 15 de octubre de 2024, la Selección Mexicana finalmente logró vencer a Estados Unidos después de una larga racha de cinco años sin victorias ante su histórico rival. Este partido amistoso, disputado en el Estadio Akron de Guadalajara, se destacó no solo por el resultado, sino por el ambiente festivo que se vivió en las gradas, con 43,537 aficionados presentes. El equipo dirigido por Javier Aguirre aprovechó la oportunidad para romper la sequía y restaurar la confianza en el Tri​

El desarrollo del partido

Desde el inicio del encuentro, el equipo mexicano mostró un juego firme, aunque los primeros minutos fueron dominados por una atmósfera de incertidumbre debido a las bajas expectativas después de varias derrotas consecutivas frente a Estados Unidos. Sin embargo, el primer gol de México llegó gracias a una genialidad de Raúl Jiménez, quien, con un tiro libre al estilo del legendario Benjamín Galindo, colocó el balón en el ángulo, desatando la euforia entre los aficionados. A lo largo del partido, Jiménez destacó no solo por su gol, sino también por su entrega al recuperar balones y generar jugadas de peligro​

El segundo gol llegó en la segunda mitad, cuando Jiménez asistió a César Huerta, quien con un remate preciso puso el marcador final de 2-0. Este resultado fue crucial para el equipo mexicano, ya que puso fin a la hegemonía estadounidense, que había derrotado a México en múltiples ocasiones en torneos como la Nations League y otros partidos amistosos​

Un resurgir para el Tri

Este triunfo no solo representó una victoria sobre su mayor rival en la región, sino también un respiro para la selección y su afición. Durante los últimos cinco años, México había enfrentado dificultades para superar a Estados Unidos, lo que incluyó cinco derrotas consecutivas y solo dos empates en sus enfrentamientos más recientes​

A nivel deportivo, esta victoria tiene un valor simbólico, ya que refuerza la confianza del equipo de cara a los torneos internacionales, en especial hacia el Mundial de 2026, que será coorganizado por México​

La fiesta en Guadalajara

La afición mexicana disfrutó de un ambiente festivo, con el estadio decorado de verde, blanco y rojo, al ritmo de música tradicional de banda. Este partido marcó el regreso de la selección a Guadalajara después de 14 años, lo que añadió un toque de emoción a la ocasión. Aunque algunos jugadores como Alexis Vega fueron recibidos con abucheos, la mayoría del equipo fue ovacionado al final del encuentro​

Conclusión

La victoria de México sobre Estados Unidos marca un antes y un después en la relación futbolística entre ambas naciones. Para México, representa una oportunidad de redención y una señal de que el equipo está en camino de mejorar su rendimiento. Para los aficionados, fue un recordatorio de que el Tri sigue siendo un contendiente formidable en la región.

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