SpaceX ahora va por los satélites

Durante años, mandar algo al espacio costaba lo mismo que una casa en la Roma Norte. Hoy, gracias a SpaceX, ya es más como comprar un depa en Ecatepec. Progreso.

Por décadas, lanzar carga al espacio era un lujo casi aristocrático:
10,000 a 20,000 dólares por kilo, según NASA, con picos de 18,500 USD/kg.
Gran parte del problema era el modelo clásico:

  • cohetes desechables
  • piezas hechas casi a mano
  • procesos artesanales
  • poca estandarización
  • cero reutilización

Hasta que SpaceX dijo:
“¿Y si lo reutilizamos… todo?”

El resultado: cohetes que regresan a casa, costos que caen en picada y una industria que tuvo que despertar a la fuerza.


El primer golpe: el cohete que volvió del más allá

La reutilización cambió todo:

  • Menos gastos
  • Más lanzamientos
  • Menos tiempos muertos
  • Más capacidad para experimentar

Los nuevos costos por kilo: 1,500 a 3,000 USD/kg, una reducción que ningún analista creyó posible hace 15 años.
El espacio dejaron de ser un club exclusivo:
ahora es más como un cowork caro.


El segundo golpe: matar al “satélite indestructible”

Antes, como lanzar era caro, los satélites debían durar décadas.
Eran obras de arte:

  • extremadamente costosos
  • irreemplazables
  • fabricados como si fueran reliquias de museo

Pero cuando el lanzamiento se volvió barato…
el modelo colapsó.

Empresas como OneWeb adoptaron producción en serie junto con Airbus, fabricando dos satélites diarios.
Pero SpaceX fue más allá:
los fabrica y los lanza con su propio cohete.
Sin terceros.
Sin permisos lentos.
Sin esperas.

Eficiencia vertical:
SpaceX se convirtió en fábrica + transportista + operador + proveedor de internet.


Números que duelen… pero a la competencia

  • OneWeb: 648 satélites, ~14,000 USD/kg
  • SpaceX Starlink: 8,000 satélites, ~2,500 USD/kg

No es solo tecnología:
es integración total del proceso.
Control de punta a punta.
Velocidad que nadie iguala.


La reacción global: todos quieren su megaconstelación

Cuando SpaceX empezó a llenar el cielo de puntitos brillantes, el mundo entró en pánico productivo:

  • Amazon lanzó Kuiper
  • Europa anunció IRIS2
  • Eutelsat se fusionó con OneWeb
  • China prepara constelaciones propias

El futuro ya no es “quién puede lanzar un satélite”, sino quién puede mantener miles allá arriba, reemplazarlos y operarlos como si fueran routers en órbita.


El objetivo final: la órbita como plataforma de servicios

La gran apuesta de SpaceX no es solo tener cohetes chidos ni satélites baratos:
es convertir la órbita baja en una infraestructura continua, donde:

  • internet,
  • logística,
  • sensores,
  • servicios militares,
  • y aplicaciones científicas

se gestionen como si fueran extensiones del planeta.

El espacio deja de ser un destino.
Se vuelve un sistema operativo.


Lo que significa

SpaceX no compite con empresas: compite con industrias completas.
Cada fase que abarata redefine reglas y obliga a todos a improvisar.
Primero los cohetes, ahora los satélites…
y lo que sigue podría cambiar todo lo que damos por hecho sobre operar desde órbita.

El futuro no es quién llega al espacio, sino quién puede quedarse ahí sin arruinarse en el intento.


Referencias

NASA — Cost per kilogram historical analysis (2024)
OneWeb — Production and cost reports (2024–2025)
SpaceX — Starlink deployment data (2025)

Explora el universo de Abejorro Media: noticias, tecnología, espectáculos y mucho más. Mantente conectado con los contenidos que informan, entretienen e inspiran. Haz clic aquí para seguir nuestra programación,
y visita nuestra página de Abejorro Media para descubrir todas las secciones:
🗞️ Noticias | 🎭 Humor político | 🌟 Espectáculos | ⚽ Deportes | 💰 Finanzas | 💻 Tecnología

COMPARTE: