1. Dimensiones del operativo
La Administración para el Control de Drogas (DEA) anunció la conclusión de un megaoperativo internacional contra el Cártel de Sinaloa, desarrollado entre el 25 y 29 de agosto de 2025. En coordinación con agencias policiales de 23 divisiones de Estados Unidos y siete países aliados, se ejecutaron acciones simultáneas que derivaron en 617 detenciones, así como la incautación de drogas, armas y millones de dólares en efectivo.
El operativo, considerado uno de los más grandes en la historia reciente de la DEA, tuvo como objetivo desmantelar la red logística y financiera del cártel, que opera en más de 40 países.
2. Resultados en decomisos
La ofensiva permitió asegurar:
- 480 kilogramos de fentanilo en polvo.
- Más de 714,000 pastillas falsificadas con mezcla de fentanilo.
- Grandes cantidades de metanfetamina, cocaína y heroína.
- Más de 11 millones de dólares en efectivo.
- Armas de alto poder y bienes inmuebles vinculados a la organización criminal.
Los resultados fueron calificados como un golpe severo a la capacidad operativa del Cártel de Sinaloa, particularmente en su red de distribución hacia Estados Unidos y Europa.
3. Coordinación internacional
El operativo no solo involucró a fuerzas estadounidenses, sino también a autoridades de México, Canadá, España, Colombia, Guatemala, Honduras y Australia. Cada país actuó sobre células locales del cártel, atacando tanto las estructuras de producción como las de transporte y lavado de dinero.
Especialistas en seguridad destacan que esta coordinación multinacional representa un avance en la cooperación global contra el crimen organizado, dado que el Cártel de Sinaloa ha desarrollado estructuras transnacionales con capacidad de adaptación.
4. Impacto en el Cártel de Sinaloa
Las autoridades señalaron que el operativo afectó principalmente a las redes de logística y distribución, más que a las cabezas visibles de la organización. Aunque se capturaron operadores de mediano nivel y financieros clave, los principales líderes del cártel permanecen en libertad.
Esto abre el debate sobre si los operativos masivos logran debilitar realmente a las organizaciones criminales, o si generan una rápida recomposición de sus estructuras, como ha ocurrido en el pasado.
5. Reacciones políticas y sociales
En México, la noticia fue recibida con un tono ambiguo. Por un lado, se reconoció el golpe al narcotráfico; por otro, surgieron críticas hacia la falta de coordinación con el Gobierno mexicano, lo que podría haber generado un repunte de violencia en algunos estados como Sinaloa y Sonora.
En Estados Unidos, la DEA destacó que el operativo refuerza la estrategia nacional contra el fentanilo, droga responsable de decenas de miles de muertes por sobredosis cada año. Funcionarios del Departamento de Justicia afirmaron que la cooperación internacional es la única vía para enfrentar organizaciones de esta magnitud.
6. Perspectiva internacional
El operativo es visto como un mensaje de fuerza global contra el crimen organizado. Países europeos resaltaron la importancia de cortar las cadenas de suministro antes de que la droga llegue a sus mercados, mientras que en América Latina se subrayó la necesidad de fortalecer las instituciones locales para evitar que estas redes resurjan con nuevas alianzas criminales.
Conclusión
El megaoperativo internacional encabezado por la DEA, con más de 600 detenidos y toneladas de drogas incautadas, constituye un hito en la lucha contra el Cártel de Sinaloa. Sin embargo, también deja abiertas preguntas sobre la eficacia de estas acciones a largo plazo y los costos en violencia que generan en países como México. La coordinación internacional muestra avances significativos, pero el desafío de desmantelar estructuras criminales transnacionales sigue siendo uno de los mayores retos de seguridad global.
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