El país se prepara para evaluar a miles de estudiantes en un contexto de debate educativo
Introducción
México ha confirmado su participación en la prueba PISA 2025, una evaluación internacional coordinada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que mide el desempeño de estudiantes de 15 años en lectura, matemáticas y ciencias. Esta decisión se produce en medio de debates sobre la calidad educativa y las metodologías de evaluación en el país.
Detalles de la aplicación de la prueba
La Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció que la prueba PISA se aplicará entre abril y mayo de 2025 en 321 planteles educativos, tanto públicos como privados, abarcando secundarias generales, técnicas, telesecundarias y bachilleratos en zonas urbanas y rurales. Se espera la participación de aproximadamente 8,000 estudiantes de 15 años.
Los exámenes estarán a cargo del Centro Nacional de Evaluación para la Educación Superior (Ceneval), institución responsable de coordinar la aplicación de la prueba en todo el país. Los resultados estarán disponibles en diciembre de 2026 y permitirán comparar el nivel educativo de los jóvenes mexicanos con el de estudiantes de más de 80 países.
Contexto y controversias
La participación de México en la prueba PISA ha estado rodeada de controversia. En 2024, la organización civil Educación con Rumbo promovió un amparo para garantizar la aplicación de la prueba, argumentando que su suspensión afectaría la evaluación del sistema educativo mexicano.
Aunque inicialmente se sugirió que una orden judicial obligaba a la SEP a aplicar la prueba, el entonces secretario de Educación Pública, Mario Delgado, aclaró que la decisión de participar fue tomada por el gobierno desde mayo de 2024, por lo que el juicio de amparo no fue determinante.
En los últimos años, el gobierno federal ha sido criticado por reducir la inversión en evaluaciones estandarizadas, y algunos analistas interpretaron la pausa en la prueba PISA 2022 como un retroceso en la transparencia educativa. Esta nueva aplicación podría representar un intento del gobierno de recuperar la confianza en el sistema.
Importancia de la evaluación
La prueba PISA ha sido históricamente un instrumento útil para identificar fortalezas y debilidades del sistema educativo mexicano. Los resultados de ediciones anteriores han revelado importantes brechas regionales, desigualdad en el acceso a recursos y bajos niveles de comprensión lectora.
Con esta nueva edición, expertos esperan que se obtenga un diagnóstico actualizado de los aprendizajes de los adolescentes, particularmente tras el impacto de la pandemia de COVID-19, que interrumpió la continuidad educativa de millones de estudiantes en todo el país.
Conclusiones
La reanudación de la prueba PISA en México representa una oportunidad para retomar la evaluación internacional como herramienta de diagnóstico y mejora. En un contexto de cambios en la política educativa y cuestionamientos a los métodos de evaluación, este paso puede marcar el inicio de un nuevo ciclo de análisis y propuestas para elevar la calidad de la educación en el país.
