Una medida proteccionista con impacto global
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el 3 de junio de 2025 una orden ejecutiva que duplica los aranceles a las importaciones de acero y aluminio, pasando del 25% al 50%. La medida entrará en vigor el 4 de junio y se justifica bajo la sección 232 de la Ley de Expansión Comercial de 1962, que permite imponer restricciones comerciales por razones de seguridad nacional. Según el decreto presidencial, los gravámenes actuales no han logrado asegurar niveles sostenibles de producción nacional para cumplir con las necesidades de defensa.
La decisión afecta a la mayoría de los países exportadores de estos metales a Estados Unidos, incluyendo México, Canadá, Brasil y Argentina. Sin embargo, el Reino Unido ha recibido una exención temporal hasta el 9 de julio, bajo un principio de acuerdo no vinculante firmado con EE.UU., siempre y cuando cumpla con los requisitos estadounidenses sobre seguridad en la cadena de suministro y propiedad de instalaciones de producción.
Reacciones internacionales y consecuencias económicas
La medida ha generado preocupación entre los socios comerciales de Estados Unidos. La Comisión Europea expresó su profundo pesar ante el anuncio, señalando que añade incertidumbre a la economía global y podría provocar respuestas en forma de contramedidas comerciales. Por su parte, China ha interpretado la decisión como un movimiento de presión, en vísperas de una posible llamada con el presidente chino Xi Jinping, que aún no se ha concretado.
Analistas advierten que la duplicación de los aranceles podría causar un aumento severo de los precios internos en EE.UU., afectando bienes como automóviles, electrodomésticos y materiales de construcción. Sin embargo, algunos fabricantes europeos podrían beneficiarse al exportar productos más competitivos a Estados Unidos.
Impacto en México y América Latina
La medida podría tener un impacto significativo en México, uno de los principales proveedores de acero y aluminio a Estados Unidos. La directora del Banco Base, Gabriela Siller, estima que las exportaciones mexicanas de estos productos podrían caer hasta en un 4%. Ante esta situación, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, viajará a Washington el 6 de junio para negociar con las autoridades estadounidenses.
En respuesta a los nuevos aranceles, la cooperativa vasca Fagor Ederlan, especializada en componentes para automoción, adquirió el 51% de la empresa estadounidense Regen Aluminum. Esta operación fortalece la presencia de Fagor Ederlan en el mercado norteamericano y garantiza el cumplimiento de las normas de contenido local del tratado USMCA.
Conclusión
La decisión de la administración Trump de duplicar los aranceles al acero y aluminio representa un giro significativo en la política comercial de Estados Unidos, con implicaciones tanto domésticas como internacionales. Mientras busca fortalecer la industria nacional, la medida podría desencadenar tensiones comerciales y afectar las relaciones con socios clave. El tiempo dirá si esta estrategia logra los objetivos propuestos o si genera consecuencias económicas no deseadas.
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