La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha reafirmado su postura en contra del nepotismo dentro del partido Morena, enfatizando la necesidad de anteponer los ideales del movimiento de transformación por encima de las ambiciones personales. Esta declaración surge en medio de debates internos sobre la reforma que busca prohibir la herencia de cargos públicos entre familiares cercanos.

Contexto de la reforma contra el nepotismo

La iniciativa de reforma presentada por Sheinbaum tiene como objetivo frenar prácticas nepotistas que han prevalecido en la política mexicana durante décadas. En diversos municipios, clanes familiares han mantenido el control político, transmitiendo cargos entre esposos, hijos y hermanos, independientemente del partido en el poder. La reforma busca impedir que familiares inmediatos de un gobernante saliente sean candidatos a sucederlo dentro de un periodo de tres años, abarcando todos los niveles de gobierno

Debate y aplazamiento de la reforma

Aunque la reforma fue aprobada en el Senado, su entrada en vigor se pospuso de 2027 a 2030, decisión que ha generado controversia y evidenciado divisiones dentro de Morena. Este aplazamiento permite que familiares de actuales gobernadores puedan postularse en las próximas elecciones, lo que contraviene el espíritu de la reforma. La presidenta ha expresado su descontento con esta decisión, advirtiendo que quienes promuevan candidaturas familiares en 2027 “se verán muy mal”. ​

Reacciones dentro de Morena

La postura firme de Sheinbaum ha llevado a figuras destacadas del partido a reconsiderar sus aspiraciones políticas. Félix Salgado Macedonio, senador de Morena, había manifestado su intención de contender por la gubernatura de Guerrero en 2027, cargo que actualmente ocupa su hija, Evelyn Salgado Pineda.

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